jueves, 14 de enero de 2010

El diablo burlón


Es un ser mitologíco indoeuropeo, que tiene similitudes con los mitos de los lares, aunque se diferencian, en que el Diaño actúa más fuera de casa y, además, , que puede adaptar múltiples formas, tanto animales como humanas.

Aún quedan los temores a la acción malévola del Diaño u Diantre; de ahí, las formulillas que aún utilizan nuestros mayores: "Arreniego del demonio"; "Arreniego del pecáu" o "Arreniego de los cotrosos del infierno"; o la más compleja, que transcribe Aurelio del Llano y otros, como esta versión de Allande: Jesús, María y José: Si sos el diaño de ti arreniego; mal año pa ti; doite mierda de gato negro; la Cruz te fago; veite pá las penas de Fontoria".

Cuento del concejo de Allande

Hace tiempo venía un sastre llamado Lorenzo de Villasonte (vivía en este pueblo de la parroquia de San Martín de Valledor) para Tremao , se le hacía tarde, pues además de darle a la aguja también le gustaba darle a la húmeda y como era el único sastre de los alrededores, trabajo no le faltaba pero a veces sí las horas, de pronto en el camino se encontró con un burro. Como ya el sol estaba desapareciendo entre las montañas, cogió al animal para trasladarse más rápidamente al pueblo pensando en devolverlo al día siguiente a su dueño. El pollino pareció en un principio manso e inocente. Pero al poco tiempo empezó a crecer y crecer, tanto que al llegar a Robledo, a mitad mas o menos del camino a Tremao, el infeliz jinete casi tocaba con la mano la punta de los castaños más altos, si saber que hacer dijo fuera de sí:¡Jesús que pollino! El animal desapareció como por encanto después de lanzar a nuestro sastre por la “groba” de San Andrés abajo, de la que pudo salir gracias a la ayuda de los vecinos que oyeron sus gritos y suplicas, el buen sastre había sido victima de una de las bromas del “diablo burlón”

7 comentarios:

Pluma Roja dijo...

Me en cantó el relato y la información. La fotografía de ilustración bella.

fue un placer leerte.

Hasta pronto, un fuerte abrazo.

Cecy dijo...

Lenyendas o cuentos.
Lindos de leer.

Saludos.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

¿Por qué será que a los sastres siempren les ocurren estas cosas?
Saludos.

daniel rico dijo...

excelente post che!

Me ncntan estas historias de diablos burlones!

Saludos!

Casía dijo...

porque tenían imaginación y había que entretener a los clientes de alguna manera jajajjaja, como sabes en epocas pasadas y pueblos alejados del mundanal ruido al calor de la lumbre siempre había alguien que contaba miles de historias para entretenimiento de los oyentes

m.eugènia creus-piqué dijo...

Me encantan los cuentos, quizá porque ya hace mucho tiempo que nadie me cuenta ninguno.Besos.

m.eugènia creus-piqué dijo...

Olvide´decirte que tengo una gran amiga en Asturias.