martes, 24 de abril de 2012

Me duele el alma

Hoy descanso, descanso del cuerpo que no de la mente y alma. El polvo se acumula en unos estantes y con el paño empiezo a apartarlo de uno de estos tesoros literarios. Dicen que nada es casualidad, así lo creo, ya que uno de los libros que pasa por mis manos es “Historia universal de Panicieiros” de nuestro gran amigo Xuan Bello (como no presumir de ello, lo somos del escritor pero mas lo somos de la persona). Lo abro evocando recuerdos de su lectura y como en Alicia en el Pais de las Maravillas, me adentro en su mundo, vuelvo a leer la dedicación, lo que hace días da mil vueltas en mi cabeza se ve plasmado en ella…. “terra manca ¡duele!...... nos escribe, El libro me sigue llamando, me adentro, una fuerza inexplicable me absorbe en sus páginas, los dedeos se deslizan. “Laberintos de tinta y papel”;"> me conmueve, por razones que enseguida entenderá el lector, un poema de Eslam Drudak: Dime, herrero, ¿Dónde están nuestras tierras, nuestros montes, nuestros ríos, nuestros campos y huertas? Nuestra patria ¿Donde está? Dime caminante, donde están nuestras sepulturas. Y el herrero caminante responde: Están en nuestras palabra, en las palabras de nuestra lengua…..” …Pero me conmueven especialmente estas palabras de Drudak porque son palabras humildes como pan, encendidas como las nuestras. ….. Me acomodo en el sofá con el libro entre las manos, lo siento por las estanterías el polvo puede esperar, creo que me merezco la satisfacción de esta lectura por… (no sé he perdido la cuenta de las veces que he leído este libro), porque como al herrero, al escritor, al caminante, hoy me duele el alma, me dule las raíces perdidas, me duele el olvido.
Hace tres años ya que me faltas, papá y me sigue doliendo el alma

8 comentarios:

trimbolera dijo...

Siempre duele, siempre ...
Tenemos el alma cargada de recuerdos.
Somos como una caja que se va llenando de lágrimas, bien tapada, pero de vez en cuando al abrirla se caen algunas.

Paco do Martelo dijo...

Hermosa lembranza.
Hay dolores que la mejor medicina no es capaz de mitigar y recuerdos que permanecerán para siempre en nuestras retinas.
Un saludo.

Rafaela dijo...

Durante cierto tiempo el alma duele, luego nos acostumbramos a vivir solo con los recuerdos.
Muy bonito como lo expresas.
Un saludo.

LOBEZNA dijo...

Lo siento mucho. Un saludo. Si puedes lee mi entrada de "es un incordio", por sino sabes lo de las letras.

Rafaela dijo...

rafaela

Carmela dijo...

"y el herrero caminante responde: Están en nuestras palabras, en las palabras de nuestra lengua…..” …Pero me conmueven especialmente estas palabras de Drudak porque son palabras humildes como pan, encendidas como las nuestras. ….."
Buena lectura.Me has emocionado con esta entrada.

A veces duele el olvido.Duele el alma.Duele la pérdida de raíces.
Pero ese dolor significa que estamos vivos.Y entonces : desamarramos los olvidos , recuperamos con la mente las raíces y el alma se ilumina de memoria .
Un abrazo.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Un fuerte abrazo.

Myriam dijo...

Vive en tu recuerdo, en tu corazón. Siempre.

Un gran abrazo y muy bienvenida a mi casa.